El ritmo de la ciudad finaliza en unos rincones y en otros se acelera de lunes a sábado. La diversión arranca desde las 17:30. Y es que el guayaquileño parece ya no distinguir entre los días laborales y fines de semana, el día no importa, solo buscan divertirse y encontrarse con amigos. Hablar de la ciudad en la noche, es hablar de diversión, los amantes de la farra buscan espacios de esparcimiento en los bares, restaurantes, cafés, las Piazzas y discotecas. No solo en barrios de “clásico clima farrero” como la Zona Rosa y Las Peñas. El espíritu nocturno no se concentra en un solo lugar, un día determinado, a una hora específica; está en todos lados, va del norte al sur, del centro a los alrededores.
Guayaquil por la noche, con vista al Puente del Velero. Foto: Freddy Zeas
Por eso dicen que el ‘guayaco’ es noctámbulo: se desvela, aunque tenga que trabajar al siguiente día, no lo espanta el frío o la inseguridad, se abriga, se cuida, y anda alerta; pero no se limita. Tiene energía extra o necesita relajarse luego de una jornada laboral, cree que sería un verdadero desperdicio dedicarse solo a descansar y no sacarle provecho a lo que es ‘buena vida’.
Lunes, en el primer día laborable de la semana son pocos los que piden farra, es un día ‘zanahoria’, la gente prefiere los restaurantes, permanece en el patio de comidas o en el área de los restaurantes de los centros comerciales como el Mall del Sol, que al mes recibe al menos un millón y medio de visitantes.
Puente del Velero, lugar donde existen diferentes opciones para distraerse. Foto: Freddy Zeas.
“Cada vez hay más vida nocturna en la ciudad, por eso pusimos nuevos restaurantes que atiendan hasta más tarde”, explicó Victor Naula Gerente de Mall del Sol, al igual que Noé (Sushi Bar de comida japonesa), y el Metro Café que cierra de lunes a jueves a las 02:00 y el viernes atiende 24 horas.
Lissete Condo, periodista de 25 años, es fiel al Noé, acude con frecuencia. “Me gusta el sabor y la atención que presta, se puede degustar un ‘roll’ o tomar cócteles mientras se mantiene una plática amena.
Yuliana Castillo, de 24 años trabaja durante el día y espera que sean las 17:30; para divertirse con sus amigos de la oficina.
Castillo es fanática del ‘after office’, una tendencia que ha dado cabida a la vida nocturna de martes a jueves, a partir de las 18:00 horas.
Discoteca Loft un viernes por la noche. Foto: Freddy Zeas.
Domenica Goncálvez, mesera de Sport Planet en San Marino, manifiesta que las personas vienen a tomarse un trago, en el ‘happy hour’ que ofrece 2x1 en cocteles. Y consumen bastante piqueos.
Algo muy similar ocurre en Tony Roma’s, Wingers y El Establo. El gerente deTony Roman´s, Ernesto Sáenz afirmo que la gente sale del trabajo directo al ‘after office’. “Son personas que necesitan relajarse para combatir el estrés laboral”, enfatizó Ernesto.
Personas como Yuliana, que ven en esta tendencia una forma de integración con varias alternativas.
Shots de tequila en Sport Planet. Foto: Freddy Zeas.
Los viernes y sábados como probablemente no haya que trabajar al día siguiente, son de discoteca. Michelle Mazuera de 20 años, farrea frecuentemente. “La pasamos bien con mis amigos de la universidad. No paramos hasta las 2 de la mañana, porque luego de eso cierran las puertas de las discotecas”, cuenta.
Pero hay muchos que se quedan. “La gente no se quiere ir, obligadamente tenemos que cerrar y dejar de vender alcohol por la Ley que rige hoy en día; sin embargo, la mayoría de personas se queda dentro, hasta terminarse la botella que han pedido o hasta que les pongamos la típica música de fin de fiesta”, añade Walter Arteaga socio de la Discoteca Loft ubicada en el edificio Sonesta
“En ese ‘son’ nos quedamos hasta las 3 y más de la mañana”, comenta Arteaga
Grupo de amigas disfrutando del After Office en Sport Platet. Foto: Freddy Zeas.
Para quienes no les apasiona tanto bailar y beber una noche completa, hay opciones diversas. En Plaza Sol usted los fines de semana hay música en vivo, y una amplia oferta de piqueos y bebidas. Si usted quiere se para y baila cerca de su mesa, y si no, se queda conversando y tomándose una cerveza.
Otra alternativa para que muchos hombres se diviertan sanamente en Guayaquil es la practica del deporte . En grupo de amigos salen a jugar fútbol los viernes, en una de las canchas sintéticas, situadas por Santa Isabel, en La Garzota, entre todos alquilan la ancha“Yo juego fútbol con un grupo de amigos los viernes, en una de las canchas sintéticas situadas por Santa Isabel, en La Garzota.
En un recorrido nocturno por la zona se puede ver a muchos jóvenes ‘peloteando’ hasta las 02:00. Y ellos afirman que mientras juegan, sus novias farrean. Sea cual sea la actividad que se realice el guayaquileño no se acuesta temprano.
Por: Freddy Zeas
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